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Parashat Tazria-Metzora – Aprendiendo lecciones de la manera difícil
- 11 de abril de 2021
- Publicado por: YPS Israel
- Categoría: Parahat Hashavua

Las Parashot de esta semana discuten la enfermedad espiritual llamada Tzara’at. A algunos les gusta traducirlo como la enfermedad de la piel llamada lepra, pero esto no es del todo exacto.
Además de la Tzara’at que puede aparecer en la piel de una persona, la Torá enseña sobre la Tzara’at que podría aparecer en la ropa e incluso en las paredes de la casa.
El Pasuk en la Parashat Metzora (Vayikra 14:34) dice …
כִּ֤י תָבֹ֙אוּ֙ אֶל־אֶ֣רֶץ כְּנַ֔עַן אֲשֶׁ֥ר אֲנִ֛י נֹתֵ֥ן לָכֶ֖ם לַאֲחֻזָּ֑ה וְנָתַתִּי֙ נֶ֣גַע צָרַ֔עַת בְּבֵ֖ית אֶ֥רֶץ אֲחֻזַּתְכֶֽם
“Cuando llegues a la tierra de Canaán, que te doy en posesión, y coloque una Tzara’at como aflicción sobre una casa en la tierra de tu posesión”.
Rashi comenta allí, citando del Midrash Rabá (17:6), “Estas son (buenas) noticias para ellos, cuando la aflicción de Tzara’at venga sobre ellos, porque los amorreos habían escondido tesoros de oro dentro de las paredes de sus casas durante los cuarenta años completos que los Israelitas estuvieron en el desierto, y a través de la aflicción, demolerán la casa y los encontrarán”.
Dado que la Torá requiere que las piedras de la casa, que están afligidas con Tzara’at sean demolidas (como se detalla en los pesukim 43-45), la Tzara’at en realidad hará que la gente descubra una gran riqueza que fue escondida por los amorreos que estaban al tanto de la inminente llegada de la Nación Judía a la tierra de Israel.
Esta situación irónica nos conduce a una dificultad.
La Guemara Arajin 16a enumera siete Averot que pueden causar que una persona sea atacada con Tzara’at. El Maharsha explica que los dos últimos, el robo y la tacañería, no afectan la piel en absoluto. El pecado de robo puede causar Tzara’at en la ropa y la casa de uno, y el pecado por ser tacaño puede causar Tzara’at solo en la casa de uno.
Esto significa que la razón por la que la gente, después de llegar a Canaán, será afligida con Tzara’at en sus casas es porque transgredirán en las áreas de robo y tacañería. La tacañería significa que uno no tiene cuidado de dar Tzedaká y hospedar a los pobres en su hogar. Y como resultado de estos pecados, serán castigados con la necesidad de demoler las piedras de sus hogares.
Si este es el caso, ¿por qué, como resultado de la demolición de sus casas, descubrirían enormes tesoros y grandes riquezas? Acaso, ¿No están en medio de ser castigados por fallar en asuntos monetarios? Entonces, ¿por qué habrían de descubrir realmente una gran riqueza? ¡¿Cómo les enseñará esto una lección?!
Posiblemente se podría responder de la siguiente manera:
Cuando una persona roba o es tacaña, es porque siente que no puede tener dinero sin hacerlo. Están demostrando que desconocen la Fuente de todas sus posesiones y su dinero. Por supuesto, es Hashem quien satisface todas las necesidades de una persona y es ridículo pensar que la única forma en que una persona podría tener lo que necesita es a través de métodos cuestionables y prohibidos, como dice el Pasuk en Jaggai 2:8 …
לִ֥י הַכֶּ֖סֶף וְלִ֣י הַזָּהָ֑ב נְאֻ֖ם ה’ צבאות
“Mía es la plata, y mío es el oro, dice Hashem de los ejércitos”.
Cuando una persona transgrede en estas áreas y luego se ve afectada por la Tzara’at en su casa, tendrá que demoler las piedras de su casa. Entonces Hashem le dará un mensaje: ¿realmente crees que necesitas robar y ser avaro para tener dinero? Mira, aquí tienes todo el dinero que podrías desear, ¡sin siquiera ir a trabajar! Y la riqueza estuvo aquí, en tu propia casa, todo el tiempo, ¡lista esperándote, sin que ni siquiera tuvieras que salir de tu casa!
Esta es una lección que nunca olvidarán: una bendición agridulce disfrazada, para afirmarles el mensaje crucial de que: Yo Soy la fuente de todo el dinero, no necesitas trabajar tan duro y ciertamente no necesitas ser deshonesto.
Si el dinero está destinado a llegar a usted, ¿por qué demoler su casa para obtenerlo? ¡Lo obtendrá de todos modos! Hashem proporciona Parnasa a todos y a todo. Cuando vayas a trabajar, sé honesto, esfuérzate y confía en Hashem, y la Brajá vendrá.
Jodesh Tov
Rab Saul Wigoda Teitelbaum, Yeshiva Pirjei Shoshanim