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Pirkei Avot 1:3 – Conforme a la Tora que te enseñan los Sabios y las leyes que te dijeran harás
Mishna 3
אַנְטִיגְנוֹס אִישׁ סוֹכוֹ קִבֵּל מִשִּׁמְעוֹן הַצַּדִּיק. הוּא הָיָה אוֹמֵר, אַל תִּהְיוּ כַעֲבָדִים הַמְשַׁמְּשִׁין אֶת הָרַב עַל מְנָת לְקַבֵּל פְּרָס, אֶלָּא הֱווּ כַעֲבָדִים הַמְשַׁמְּשִׁין אֶת הָרַב שֶׁלֹּא עַל מְנָת לְקַבֵּל פְּרָס, וִיהִי מוֹרָא שָׁמַיִם עֲלֵיכֶם
Antígnos Ish Sojó recibió de Shimon el Justo. El solía decir: No sean como los siervos que sirven a sus amos para recibir recompensa, sino, sean siervos que sirven a sus amos con la intención de NO recibir recompensa; y que el temor al Cielo esté sobre ustedes.
Antígnos o Antígonos, era un hombre de una ciudad llamada Sojó que no solo solía decir, sino que también él era ejemplo de vida, cumpliendo con lo que decía.
Si tenemos a Di-s con nosotros, debemos tener interiorizados dos conceptos que son la base de nuestro servicio: el amor y el temor. Por amor cumplimos con todas las Mitzvot positivas, por cuanto amamos a Hashem. Y por temor no hacemos las Mitzvot negativas, porque tienen un castigo dependiendo del caso y eso causa temor. El Zohar dice que el amor y el temor son dos alas para que la persona pueda subir espiritualmente, y son necesarias las dos, de lo contrario es imposible subir.
Las Mitzvot positivas no tienen ningún castigo si no se cumplen, pero se deja de ganar indulgencias o beneficios que ni siquiera imaginamos. Solo tenemos dos Mitzvot que, si no se cumplen, si tienen castigo: No comer Korban Pesaj y no hacer Brit Milá.
Si Hashem me ha dado todo, ¿cómo no voy a cumplir y hacer por amor a ÉL todo lo que me pide? ¿Si tus hijos o tus padres quieren comer un trozo de pan no se lo darías? ¡Claro que sí!, predomina tu amor por ellos! Igual debemos hacer con HaKadosh Baruj Hu. ÉL no necesita nada de nosotros, pero nos pide que cumplamos Mitzvot, y si ÉL nos lo pide, hay que cumplirlas… Por amor.
Todas las Mitzvot son importantes, pero el estudio diario de Torá es vital no solo en este mundo, sino que lo es aún más en el mundo venidero. No debemos tener otro propósito al estudiar la sabiduría, que la sabiduría misma. O sea, aprender, entender, comprender y saber; así el anhelo en perseguir la verdad no es otro que la verdad en si misma. La Torá es la verdad, y el objetivo de estudiarla es ponerla en práctica. Dijeron nuestros sabios: Está escrito en Salmos 112-1: “HaleluYáh. Alabado el hombre que teme a Hashem, que se complace intensamente en Sus mandamientos. O sea, en Sus mandamientos me regocijo. Dijo Rabí Eleazar: En Sus mandamientos está escrito, no en la recompensa de Sus mandamientos.”
También tenemos el temor Celestial, el cual es de una gran ayuda para abstenernos de cometer transgresiones. Tememos a la grandeza de Hashem y nos causa por tanto un respeto mayor, sobre todo con respecto a aquellos preceptos (Mitzvot o mandamientos) cuyo sentido lógico no podemos verlo a simple vista, o que simplemente creemos que carecen de sentido.
Está escrito en la Torá: “Al Eterno, tu Di-s, temerás” (Deut. 6:13). Al respecto dijeron nuestros Sabios: ” Servid a Di-s con amor, Servidlo con temor. Amor, para no olvidar nada de lo que te haya encomendado hacer y temor para abstenerte de hacer algo que te haya advertido de no hacer”.
Antígonos nos viene a enseñar, cómo debemos santificar a Di-s, cumplir Mitzvot son oportunidades únicas que ÉL nos da. Con ellas hacemos Su voluntad; nuestra vida nos fue dada con una finalidad, cumplir Mitzvot; y no lo hacemos por un premio porque ni siquiera sabemos cuál es. La mayor bendición que tenemos es hacer lo correcto y al cumplir esa voluntad por Su amor, nos apegamos a ÉL.
“Conforme a la Tora que te enseñan (los Sabios) y las leyes que te dijeran harás, no te apartarás de sus palabras que te encomendaran, ni a derecha ni a izquierda”. (Deut. 17-11).
Shavua Tov
Rab Saul Wigoda Teitelbaum, Yeshiva Pirjei Shoshanim Israel